viernes, 24 de abril de 2009

Paraguayo Lugo:Hombre Progresista sin Palabra... Hombre de Poca Fe.

Fernando Lugo:Un ex Obispo católico devenido tras renunciar a la investidura en Presidente progresista del Paraguay.Acosado por la testosterona anda en aprietos.

Repaso noticioso de últimas horas: En estos días murió en España Corín Tellado, la prolífica escritora de triángulos amorosos más leída que el propio Miguel de Cervantes Saavedra ; los presidentes sudamericanos, unánimemente, le congelan el apunte al poderoso Hussein Obama, Primer Mandatario de los EE.UU, simplemente por negarse a acompañar una declaracionsita protocolar de buenos propósitos´...“hasta que nos conozcamos en nuestras verdaderas y recíprocas intenciones, esperando el visto bueno del camarada Fidel Castro”, parecerían indicar las conductas motivantes.
El moreno de Washington, pese a ser muy entrador y simpático, es de suponer habrá quedado como novia de antes previo a consentir el matrimonio que en el instante crucial escucha el No de una renuncia varonil en el altar.
Finalmente otra información concatenada recorre el destartalado MERCOSUR, referida a la pública prodigalidad erótica del Presidente paraguayo Fernando Lugo, puesta entonces en evidencia con llantitos de bebés, mucho chiquitos medio hermansos entre sí.
Se trata el Casanovas de un ex obispo que colgó los hábitos-no el sacramento de investidura sacerdotal que solo la muerte lo extingue según la teogonía romana-que pudo
sacar finalmente del Poder al viejo, populista y anacrónico Partido Colorado de Alfredo Stroessnner y otros ejemplares. Su fama actual está maculada a raíz de una multi paternidad reconocida que se pone en evidencia día a día con la aparición de un nuevo chiquitín semanal procedente de humildes vientres de muchachas adoratrices del ayer vicario y ahora soberano democrático en ejercicio del Poder Ejecutivo.
La Historia jamás se repite pues diferentes son -y lo serán siempre- sus protagonistas y el
encuadre espacio temporal que los reúne, lo suficiente como para que el producto comparado no sea análogo en los cotejos de almanaques, cercanos o lejanos. Sin embargo impresiona la fuerza testosteronal del político paraguayo que ha hecho una religión con tintes de añejos paganismos las penetraciones…al alma de sus compañeras de ocasión.
Lugo aprovechó sin dudas la vieja ecuación libidinosa de la apropiación de carne guaraní por las genéticas turisticas de las bitácoras,éxodos y traslados de todas las migraciones de la antiquísima Hispania-tierra de conejos, siempre tan fértiles los roedores-de visigodos, vándalos, celtas, suevos, ostrogodos, cartagineses, griegos, romanos, árabes, negros ,negroides, libios, godos y vascuences,etc. llegadas en mezcla indescifrable a la Amerindia mongoloide en los conocidos tiempos coloniales ibéricos. Los efectos insoslayables fueron el mestizaje y su primo hermano:el fenómeno de la asimilación o aculturación que dio originen a los “mancebos de la tierra”, verdaderos mandingas para el hijosdalgo castellano de solar conocido..
Al promediar el Siglo XVI, comenzó fuerte la etapa asunceña del dominio español en la cuenca del Río de la Plata. Santa María de la Trinidad de los Buenos Aires estaba muy relegada como hambrienta por entonces que fue antropófaga en varias ocasiones. El Paraguay...¿qué decirles?... un enorme Hotel Alojamiento entre razas y sub razas.
Voluntarios o no habrán sido los acoples, pero que los hubo a troche y moche en noches y soles de lujurias ilimitadas es veredicto testimonial de veracidad y autenticidad.
Desagreguemos el juicio para otra oportunidad si el acto era moral y jurídicamente consentido. Digamos, simplemente, que ¡era! sin adjetivaciones piadosas.
Montevideo todavía no había sido fundada y debió esperar a que Bruno Mauricio de Zabala desde Buenos Aires moviera su pesada parsimonia antes que se le metieran los lusitanos en la bahía del Monte Sexto de Este a Oeste (Monte -VI- d- eo), hace rato instalados por 1680 en la Nova Colona del Sacramento que empezaba afilándose para que en el Siglo XX la nominaran- honor que obtuvo- Patrimonio Histórico de la Humanidad.
La desértica Banda Oriental-lo sigue siendo que no alcanzamos todavía a tres millones y medio de llorones y eso que da para vivir veinte a las risas- aguardaba los principios del siglo XVII para que el criollo Hernandarias trajera por Soriano bovinos vacunos de forma tal que hubiese algo más que “pájaros pintados” y caracoles para que los describieran los poetizados antropólogos culturales en sus catálogos truchos, amén de tolderías indios de las que menos se sabe que de lo que sí.
Los historiadores racistas de nuestra época saltaban de orgullo pues habían encontrado una bello giro literario para prostituir su ciencia con literatura. Decían a raíz del desembarco de toros y vacas en la Boca del Yaguarí por Hernandarias que “la riqueza (bovina) había precedido la llegada del Hombre” (blanco).Y yo me pregunto estupefacto: los indios ¿Qué eran? ¿Reptiles?...o una plaga para liquidar casi del todo, años después, por 1831, en el arroyo Salsipuedes la familia Rivera?.
En este siglo XXI del primer gobierno “pogresista” en el reino de la ñanduty, el Sr.Fernando Lugo, ya sin las investiduras de obispo, tomó las pancartas políticas con gran suceso y ganó las elecciones nacionales . Obviamente -como ha ocurrido en tantas otras partes de América- ayudado graciosamente por las incompetencias irresponsabilidades corruptas de los oligarcas nativos, jugando a la democracia, gobernando sólo para su plutocracia de bolsillos abultados.

Hoy por este 2009 del señor, sigue el"encuentro de culturas"ovular(xx de los cromosomas reproductores femeninos) y espermatozoidal (xy de los masculinos).Lugo, el hedónico vil , antes que en la política se interesó más por la mueblería. La opción individual es problema propio.En lo social, en su rol social de gobernante, resulta un tramposo no creíble. Olvidó y renegó de la Palabra.Quien la viola, viola el Verbo, que "en el Principio fue".
La redención educativa del atrasado Paraguay debe comenzar por la palabra.No hay otra. Escuchad y haces “buenas palabras”.En el Paraguay…¡ y en el Uruguay también! No mentir a sabiendas.

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