sábado, 21 de noviembre de 2009

El Mapa de Uruguay en la Insular Roca Mallorquina.




Mallorca es una comunidad autónoma española constituida por un archipiélago en el mar Mediterráneo cuya idioma es el catalán transformado por el uso al punto que se le llama mallorquín, gentilicio también de sus habitantes, alrededor de 900 mil, con fluctuaciones acompasadas a los ritmos del turismo en tan bella tierra.
Justamente es la actividad recreativa la que sostiene su economía junto a la industria paralela y complementaria de la construcción.
El gran pintor y docente tecnológico mercedario Pedro Blanes Viale –introductor pionero junto a su coterráneo Carlos Federico Saez del Impresionismo nacional- se radicó allá, donde aún viven sus familiares. Inspirado, creó desde el paisaje de aquel paraíso buena parte de su mejor producción.
Todo lo precedente y vincular al destacado artista plástico era la información más relevante en exigüidad que tenía para asociar como divertimento a nuestra ciudad con las ínsulas baleares.
Sin embargo en los últimos tiempos, junto al fenómeno de la emigración uruguaya hacia Europa, en un retorno genealógico de los sinuosos ciclos que crean los vaivenes de la Historia, muchos compatriotas se han radicado en Mallorca durante las últimas dos décadas, manteniendo inocultas nostalgias que recrean sentimientos de enlaces ancestrales, tanto desde los que se alejaron- aunque sin ajenizarse en reminiscencias- como en los que aquí estamos.
Una importante colonia oriental se ha formado en Palma de la Gran Mallorca y en otras localidades como Ibiza y Art Calviá , especialmente mercedarios, montevideanos y canarios.
Esa viajera generación inicial está formada por gente joven que llevó su familia nuclear. Al momento no es de estimar en cifras el adviento de nuevos “españolitos” de padres criollos uruguayos. Sin embargo, está la pujante chiquilinada en el período de los romances del amor que seguramente fortalecerán la fijación de estadías, ya virtualmente a sedentarizarse para siempre en el escenario socio cultural del Mediterráneo hispánico…. y para quien el nombre de Uruguay sólo será alguna repetitiva anécdota, cada vez más intensa en el recuerdo propio y con lilácea melancolía perdurable de sus progenitores en la medida que envejezcan y que aquella juventud recepcionará, más por respetuosidad formal si cabe al padre o al abuelo, que por profunidad emocional . (¡O no!..."que hay razones del corazón que la razón no entiende.")
Ese relacionamiento trunco en lo presencial hacia rostros amigos que dejamos de ver en las cotidianeidades de la querida rambla, el Praga y el Remeros, Estadio Koster, Plaza Independencia, Terminal Shopping, concursos de Carnaval, liceos e Institutos, nos llevó a buscar formas sustitutas de mantener cálidos leños encendidos para que las ausencias nos los apagaran tan fácilmente con el hielo de la reducción.
Internet fue una imprevista y bienvenida gracia sucedánea dentro de lo viable.
Cierta noche, navegando en la red www, busqué Art. Calviá, donde vive Federico Marotta con sus hijos y Lorena Martínez, muy cercano relativamente por dónde están los González-Rey De María, Cacho Mesa Giménez, Cano, Milo Ferreira Perroni , Jorge Meyer y tantos más…
De repente, veo una foto que describía una curiosidad geo-oro-morfológica en las proximidades de uno de los tantos acantilados de la arisca costa mallorquín, interrumpida maravillosamente cada tanto por generosas playas de bellezas espléndidas, cielo azul y aguas verdosas , escuchando desde el alma canora a Joan Manuel Serrat "nací en el Mediterráneo".... Una enorme oquedad en la roca permitía apreciar su peculiar diseño, al parecer obra exclusiva de la naturaleza, copiado como insólito clon al mapa de Uruguay del Atlas de Giuffra y Di Leoni de nuestra lejana juventud liceal, ese que acompañaba al libro de texto de Geografía “El Mundo tal cual es”, entonces repartido gratuitamente por un año a todos los estudiantes junto al resto de los libros curriculares (¡qué tiempos!).
Por e-mail le pregunté a Federico si sabía algo del asunto y que en tal caso me enviara lo que pudiera justificar el raro hallazgo fotográfico.
Despues de algunas semanas, el amigo me remitió la siguiente misiva electrónica acompañada por fotografías que se adjuntan en esta charada:
-La Carta y Fotos de Federico del Mapa Uruguayo en Roca Viva Mallorquina-

Estimado amigo Charo:
Las casualidades me llevaron a encontrar lo que creo es el mapa de Uruguay en unas rocas de Calviá, pedido de información que me hiciste en su momento.
Te envío estas dos fotos, que sirven para localizar dónde estaría la casualidad. Para confirmarla sería necesario que fuese por esa zona, pero por lo que veo el mejor acceso es por barco.
En “Mapa Uruguay” verás dos fotos, la de arriba son las Islas Malgrats (que también están en Calviá), pero en la foto de abajo verás bien, en el centro, como asoma el norte uruguayo. En uno de esos barcos turísticos hicimos un paseo Lorena y yo hace como tres años. Verás en la otra foto, (Roca Uruguay) que por casualidad también le saqué a Lorena una toma de escaso valor -ni siquiera miraba la cámara- pero con el resultado del mapa detrás.
Hasta aquí va mi informe.
Pero no he encontrado otros que hagan suponer un trabajo del hombre. Parece ser el mapa una circunstancia de la evolución, simplemente.
Un abrazo.
Federico.

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