Los Centenarios del 2009
*
Prototipo tractor Ford. ------------------------>
<-Felipe Tomás Marinetti:"Quere-mos cantar el amor al peligro, el hábito de la energía y de la temeridad."
*José E. Rodó: " La intolerancia jacobina ve siempre en el otro un enemigo".
El próximo y virtual 2009, cuya madre ya está haciendo las primeras contracciones para presentárselo a su padre el almanaque, trae a la evocación sucesos convencionales y regresivos que, en pocos días más, alcanzarán su primer centenario dentro de un bombardeo de juguete que nada tiene que ver con los verdaderos y tan inhumanos de Gaza, frontera norte de Israel, Afganistán, Irak, Kashmir, Colombia, Sri Lanka, India, Pakistán, Congo, Grecia, etc.(Después de todo...los uruguayos nos quejamos casi que por nada, solo de nuestra incompetencia para ser super felices, que felices, en verdad tenemos que serlo por gracia de Dios y nuestra , si acaso nos comparamos con otros y desgraciados pueblos. No...no...no me lo diga:Ya sé, mal de otros...¡consuelo de tontos!)
*En nuestro país las lanzas y las armas de fuego fueron sustituidas por los votos electorales ya con el fin de las guerras civiles en 1904, a pesar de que se preparaba un nuevo intento que tomaría forma en 1910, no en 1909.
*Parecería que la pacificación sublimaba antiguas energías bélicas en una producción intelectual de notable proyección, no solamente paisana sino americana y universal:
*Fue sorprendente por méritos de excelencias: Carlos Vaz Ferreira edita “Moral para Intelectuales” (¡a releerlo, de a puro, muchachos de las chacras políticas, profesionales y periodísticas!) y “El Pragmatismo”. José Enrique Rodó los célebres “Motivos de Proteo”. Eduardo Acevedo pone broche de titanio a la leyenda anti artiguista y reafirma a una pléyade de antecesores revisionistas del Gran Republicano del Americanismo con su “Artigas, Alegato Histórico”.
*El romántico Julio Herrera y Reissig tan admirado por el gran español Miguel Hernández, eyecta “La Torre de las esfinges” y “Las Clepsidras” , en tanto Armando P.Vasseur hace lo propio con “Cantos del otro yo”.
*Se inaugura del Arq. Alfredo Jones Brown el edificio actual del Instituto Alfredo Vázquez Acevedo (IAVA) por la Sección Enseñanza Secundaria de la Universidad de la República que hoy está siendo restaurado para el jubileo del inminente centenario y que ¡ojalá! los sucios depredadores de siempre no vuelven sus muros a ser el emporio de la mugre panfletaria.
*Y ya que hablamos de Secundaria se suprime el estudio del Latín, política anti lingüística que décadas después, muy cercanas a las contemporáneas, ha originado inestables actitudes interdictas similares contra lenguas vivas, caso de intentos en Italiano, Francés, Inglés (por disminución).Se suprimía pues el latín y además, por ley, la Asamblea General elimina los honores militares en los ceremoniales religiosos, con veto en su momento del Poder Ejecutivo del colorado Claudio Williman (¡ah!) y se descarta la enseñanza y práctica confesional en las escuelas públicas, consecuencia de un férreo y victorioso laicismo batllista que se explaya y consolida.
*Pedro Figari pinta “Mercado Viejo”; en tanto Manuel Rosé y José Bellni son becados para estudiar en Europa .
*Se crea el Instituto Histórico y el Instituto Nacional de Sordomudos.
*Fallece Samuel Blixen.
*En el mundo se produce el primer vuelo entre Francia e Inglaterra vía canal de la Mancha.
*Henry Ford fabrica los primeros tractores.
*Y en París el egipcio Felipe Tomás Marinetti, formado en Europa (París, Génova, Papua),difunde su “Manifiesto Futurista” que captará a muchos intelectuales, algunos por siempre, otros que luego pegariann la vuelta. Es el adelanto artístico, mejor, cultural, de las concepciones fascistas que captarían a muchos en las dos décadas siguientes…y que aún aparece en discursos literarios y actitudes conductuales por nuestros días.Dice así, este adelanto de un fascismo en estado, por ahora, fetal:
Manifiesto futurista
1. Queremos cantar el amor al peligro, el hábito de la energía y de la temeridad.
2. El coraje, la audacia, la rebelión, serán elementos esenciales de nuestra poesía.
3. La literatura exaltó, hasta hoy, la inmovilidad pensativa, el éxtasis y el sueño. Nosotros queremos exaltar el movimiento agresivo, el insomnio febril, el paso de corrida, el salto mortal, el cachetazo y el puñetazo.
4. Nosotros afirmamos que la magnificencia del mundo se ha enriquecido con una nueva belleza, la belleza de la velocidad. Un coche de carreras con su capó adornado con gruesos tubos parecidos a serpientes de aliento explosivo... un automóvil rugiente, que parece correr sobre la ráfaga, es más bello que la Victoria de Samotracia.
5. Queremos ensalzar al hombre que lleva el volante, cuya lanza ideal atraviesa la tierra, lanzada también ella a la carrera, sobre el circuito de su órbita.
6. Es necesario que el poeta se prodigue, con ardor, boato y liberalidad, para aumentar el fervor entusiasta de los elementos primordiales.
7. No existe belleza alguna si no es en la lucha. Ninguna obra que no tenga un carácter agresivo puede ser una obra maestra. La poesía debe ser concebida como un asalto violento contra las fuerzas desconocidas, para forzarlas a postrarse ante el hombre.
8. ¡Nos encontramos sobre el promontorio más elevado de los siglos!... ¿Porqué deberíamos cuidarnos las espaldas, si queremos derribar las misteriosas puertas de lo imposible? El Tiempo y el Espacio murieron ayer. Nosotros vivimos ya en el absoluto, porque hemos creado ya la eterna velocidad omnipresente.
9. Queremos glorificar la guerra –única higiene del mundo– el militarismo, el patriotismo, el gesto destructor de los libertarios, las bellas ideas por las cuales se muere y el desprecio de la mujer.
10. Queremos destruir los museos, las bibliotecas, las academias de todo tipo, y combatir contra el moralismo, el feminismo y contra toda vileza oportunista y utilitaria.
11. Nosotros cantaremos a las grandes masas agitadas por el trabajo, por el placer o por la revuelta: cantaremos a las marchas multicolores y polifónicas de las revoluciones en las capitales modernas, cantaremos al vibrante fervor nocturno de las minas y de las canteras, incendiados por violentas lunas eléctricas; a las estaciones ávidas, devoradoras de serpientes que humean; a las fábricas suspendidas de las nubes por los retorcidos hilos de sus humos; a los puentes semejantes a gimnastas gigantes que husmean el horizonte, y a las locomotoras de pecho amplio, que patalean sobre los rieles, como enormes caballos de acero embridados con tubos, y al vuelo resbaloso de los aeroplanos, cuya hélice flamea al viento como una bandera y parece aplaudir sobre una masa entusiasta. Es desde Italia que lanzamos al mundo este nuestro manifiesto de violencia arrolladora e incendiaria con el cual fundamos hoy el FUTURISMO porque queremos liberar a este país de su fétida gangrena de profesores, de arqueólogos, de cicerones y de anticuarios. Ya por demasiado tiempo Italia ha sido un mercado de ropavejeros. Nosotros queremos liberarla de los innumerables museos que la cubren por completo de cementerios.
*En nuestro país las lanzas y las armas de fuego fueron sustituidas por los votos electorales ya con el fin de las guerras civiles en 1904, a pesar de que se preparaba un nuevo intento que tomaría forma en 1910, no en 1909.
*Parecería que la pacificación sublimaba antiguas energías bélicas en una producción intelectual de notable proyección, no solamente paisana sino americana y universal:
*Fue sorprendente por méritos de excelencias: Carlos Vaz Ferreira edita “Moral para Intelectuales” (¡a releerlo, de a puro, muchachos de las chacras políticas, profesionales y periodísticas!) y “El Pragmatismo”. José Enrique Rodó los célebres “Motivos de Proteo”. Eduardo Acevedo pone broche de titanio a la leyenda anti artiguista y reafirma a una pléyade de antecesores revisionistas del Gran Republicano del Americanismo con su “Artigas, Alegato Histórico”.
*El romántico Julio Herrera y Reissig tan admirado por el gran español Miguel Hernández, eyecta “La Torre de las esfinges” y “Las Clepsidras” , en tanto Armando P.Vasseur hace lo propio con “Cantos del otro yo”.
*Se inaugura del Arq. Alfredo Jones Brown el edificio actual del Instituto Alfredo Vázquez Acevedo (IAVA) por la Sección Enseñanza Secundaria de la Universidad de la República que hoy está siendo restaurado para el jubileo del inminente centenario y que ¡ojalá! los sucios depredadores de siempre no vuelven sus muros a ser el emporio de la mugre panfletaria.
*Y ya que hablamos de Secundaria se suprime el estudio del Latín, política anti lingüística que décadas después, muy cercanas a las contemporáneas, ha originado inestables actitudes interdictas similares contra lenguas vivas, caso de intentos en Italiano, Francés, Inglés (por disminución).Se suprimía pues el latín y además, por ley, la Asamblea General elimina los honores militares en los ceremoniales religiosos, con veto en su momento del Poder Ejecutivo del colorado Claudio Williman (¡ah!) y se descarta la enseñanza y práctica confesional en las escuelas públicas, consecuencia de un férreo y victorioso laicismo batllista que se explaya y consolida.
*Pedro Figari pinta “Mercado Viejo”; en tanto Manuel Rosé y José Bellni son becados para estudiar en Europa .
*Se crea el Instituto Histórico y el Instituto Nacional de Sordomudos.
*Fallece Samuel Blixen.
*En el mundo se produce el primer vuelo entre Francia e Inglaterra vía canal de la Mancha.
*Henry Ford fabrica los primeros tractores.
*Y en París el egipcio Felipe Tomás Marinetti, formado en Europa (París, Génova, Papua),difunde su “Manifiesto Futurista” que captará a muchos intelectuales, algunos por siempre, otros que luego pegariann la vuelta. Es el adelanto artístico, mejor, cultural, de las concepciones fascistas que captarían a muchos en las dos décadas siguientes…y que aún aparece en discursos literarios y actitudes conductuales por nuestros días.Dice así, este adelanto de un fascismo en estado, por ahora, fetal:
Manifiesto futurista
1. Queremos cantar el amor al peligro, el hábito de la energía y de la temeridad.
2. El coraje, la audacia, la rebelión, serán elementos esenciales de nuestra poesía.
3. La literatura exaltó, hasta hoy, la inmovilidad pensativa, el éxtasis y el sueño. Nosotros queremos exaltar el movimiento agresivo, el insomnio febril, el paso de corrida, el salto mortal, el cachetazo y el puñetazo.
4. Nosotros afirmamos que la magnificencia del mundo se ha enriquecido con una nueva belleza, la belleza de la velocidad. Un coche de carreras con su capó adornado con gruesos tubos parecidos a serpientes de aliento explosivo... un automóvil rugiente, que parece correr sobre la ráfaga, es más bello que la Victoria de Samotracia.
5. Queremos ensalzar al hombre que lleva el volante, cuya lanza ideal atraviesa la tierra, lanzada también ella a la carrera, sobre el circuito de su órbita.
6. Es necesario que el poeta se prodigue, con ardor, boato y liberalidad, para aumentar el fervor entusiasta de los elementos primordiales.
7. No existe belleza alguna si no es en la lucha. Ninguna obra que no tenga un carácter agresivo puede ser una obra maestra. La poesía debe ser concebida como un asalto violento contra las fuerzas desconocidas, para forzarlas a postrarse ante el hombre.
8. ¡Nos encontramos sobre el promontorio más elevado de los siglos!... ¿Porqué deberíamos cuidarnos las espaldas, si queremos derribar las misteriosas puertas de lo imposible? El Tiempo y el Espacio murieron ayer. Nosotros vivimos ya en el absoluto, porque hemos creado ya la eterna velocidad omnipresente.
9. Queremos glorificar la guerra –única higiene del mundo– el militarismo, el patriotismo, el gesto destructor de los libertarios, las bellas ideas por las cuales se muere y el desprecio de la mujer.
10. Queremos destruir los museos, las bibliotecas, las academias de todo tipo, y combatir contra el moralismo, el feminismo y contra toda vileza oportunista y utilitaria.
11. Nosotros cantaremos a las grandes masas agitadas por el trabajo, por el placer o por la revuelta: cantaremos a las marchas multicolores y polifónicas de las revoluciones en las capitales modernas, cantaremos al vibrante fervor nocturno de las minas y de las canteras, incendiados por violentas lunas eléctricas; a las estaciones ávidas, devoradoras de serpientes que humean; a las fábricas suspendidas de las nubes por los retorcidos hilos de sus humos; a los puentes semejantes a gimnastas gigantes que husmean el horizonte, y a las locomotoras de pecho amplio, que patalean sobre los rieles, como enormes caballos de acero embridados con tubos, y al vuelo resbaloso de los aeroplanos, cuya hélice flamea al viento como una bandera y parece aplaudir sobre una masa entusiasta. Es desde Italia que lanzamos al mundo este nuestro manifiesto de violencia arrolladora e incendiaria con el cual fundamos hoy el FUTURISMO porque queremos liberar a este país de su fétida gangrena de profesores, de arqueólogos, de cicerones y de anticuarios. Ya por demasiado tiempo Italia ha sido un mercado de ropavejeros. Nosotros queremos liberarla de los innumerables museos que la cubren por completo de cementerios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario