El Ojo que Te Ve.
* Mis ojos, los del Charo que soy, según el análisis de irrigacion vascular, podrán seguir tirando años más, pero... ¡hoy sufrí de expectativas. Mis ojos verdad en la Imagenología virtual.--->
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* Octubre de 1966:Peñarol 2-Real Madrid 0 en el Estadio "Centenario" de Montevideo..Hacia la Copa del Mundo el aurinegro de Spencer y Joya, goleadores en aquella multitudinaria monotribuna partidaria...y el fotógrafo improviosado de 23 años (¡hace ya más también de 23!) con su ojo ordenándole dónde dirigir el cuello y, en ristre, la máquina del gran Armando López, el inolvidable compadre finadito, perpetuador gráfico de los últimos 40 años de la historia general de Mercedes y Soriano, mi venerable lazarillo de ciego caminante por la instantáneas del fútbol mayor que debíamos documentar en vísperas de una gloria más para el país deportivo. ..->
......
Recordaré este o8 de octubre de 2010, que en la tarde me habían coordinado un examen de fondo de ojo para apreciar algunas sospechas preocupantes sobre su irrigación vascular.
Afortunadamente ¡podré seguir viendo con fidelidad!... a mi nietito... a mi familia, amigos y al prójimo! Gracias-como decía Violeta, la de Parra chilena- a la Vida, que me ha dado tanto...en el caso incluida esta feliz redención post susto.
No vengan a mi absolutistas con que lo esencial es invisible a los ojos....aunque quizás tenga mucho de razón Antoine de Saint Exùpery en su "Petit Prince".
Claro, constato que si poseemos ojos entrenados para
ver y que, si ellos estàn convenientemente educados, nos llevarán con firmeza, solvencia y probidad hacia nosotros mismos.Podremos profundizar en las sutilezas de los paisajes exteriores e interiores de nuestras eto ecologías con mejor "visión" que con visibilidad, que ya es otra percepción de menor talla la que por ende cotiza más bajo en la Bolsa de los Juicios.
Es que "Ojos que no ven, corazón que no siente".
Si no se vé el asentamiento o cantegril, favela, villa miseria o chabola, no introyectaremos jamás una idea sensible de misericordia -salvo allí viviendo pesares indignos- como el invierno aterido o el infierno calcitrante de las chapas de zinc en el verano atroz para la promiscua sentencia de tantos niños y el resto de sus seres desgraciados. Y así, cuántas cosas, sucesos y fenómenos.
No puedo desgajar en abstracción la idea de bondad si no veo a Anito Moranti levantando canchitas de fútbol para los niños y jóvenes pobres.
A Pedro Bentancourt preparando el menú a favor cristiano de caritas hambrientas de ojos humedecidos.
Al Dr. Noel Moreira ofreciendo sus consultas y luego el consecuente y sempiterno "después me pagás".
O a mi inolvidable maestra y profesora Thamar Méndez Balarini llevando al terreno privado el concepto de gratuidad por acción y gracia de su apostolado docente.
No hay caso Antonio, que tan bien lo decías desde tu amada y sufrida España.
-" El ojo que ves no es
ojo porque tú lo veas;
es ojo porque te ve."
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El ojo que ves no es
ojo porque tú lo veas;
es ojo porque te ve.
Para dialogar,
preguntad, primero;
después...escuchad.
Busca a tu complementario
que marcha siempre contigo
y suele ser tu contrario.
que marcha siempre contigo
y suele ser tu contrario.
En mi soledad
he visto cosas muy claras
que no son verdad.
Antonio Machado, Proverbios
y Cantares.
* Octubre de 1966:Peñarol 2-Real Madrid 0 en el Estadio "Centenario" de Montevideo..Hacia la Copa del Mundo el aurinegro de Spencer y Joya, goleadores en aquella multitudinaria monotribuna partidaria...y el fotógrafo improviosado de 23 años (¡hace ya más también de 23!) con su ojo ordenándole dónde dirigir el cuello y, en ristre, la máquina del gran Armando López, el inolvidable compadre finadito, perpetuador gráfico de los últimos 40 años de la historia general de Mercedes y Soriano, mi venerable lazarillo de ciego caminante por la instantáneas del fútbol mayor que debíamos documentar en vísperas de una gloria más para el país deportivo. ..->
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Recordaré este o8 de octubre de 2010, que en la tarde me habían coordinado un examen de fondo de ojo para apreciar algunas sospechas preocupantes sobre su irrigación vascular.
Afortunadamente ¡podré seguir viendo con fidelidad!... a mi nietito... a mi familia, amigos y al prójimo! Gracias-como decía Violeta, la de Parra chilena- a la Vida, que me ha dado tanto...en el caso incluida esta feliz redención post susto.
No vengan a mi absolutistas con que lo esencial es invisible a los ojos....aunque quizás tenga mucho de razón Antoine de Saint Exùpery en su "Petit Prince".
Claro, constato que si poseemos ojos entrenados para
ver y que, si ellos estàn convenientemente educados, nos llevarán con firmeza, solvencia y probidad hacia nosotros mismos.Podremos profundizar en las sutilezas de los paisajes exteriores e interiores de nuestras eto ecologías con mejor "visión" que con visibilidad, que ya es otra percepción de menor talla la que por ende cotiza más bajo en la Bolsa de los Juicios.
Es que "Ojos que no ven, corazón que no siente".
Si no se vé el asentamiento o cantegril, favela, villa miseria o chabola, no introyectaremos jamás una idea sensible de misericordia -salvo allí viviendo pesares indignos- como el invierno aterido o el infierno calcitrante de las chapas de zinc en el verano atroz para la promiscua sentencia de tantos niños y el resto de sus seres desgraciados. Y así, cuántas cosas, sucesos y fenómenos.
No puedo desgajar en abstracción la idea de bondad si no veo a Anito Moranti levantando canchitas de fútbol para los niños y jóvenes pobres.
A Pedro Bentancourt preparando el menú a favor cristiano de caritas hambrientas de ojos humedecidos.
Al Dr. Noel Moreira ofreciendo sus consultas y luego el consecuente y sempiterno "después me pagás".
O a mi inolvidable maestra y profesora Thamar Méndez Balarini llevando al terreno privado el concepto de gratuidad por acción y gracia de su apostolado docente.
No hay caso Antonio, que tan bien lo decías desde tu amada y sufrida España.
-" El ojo que ves no es
ojo porque tú lo veas;
es ojo porque te ve."
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