La Gracia de la Desgracia

Comedia.-La Fontana de Trevi.............La Tragedia.- Lo Grotesco

Mi coterráneo Alejandro Paz en El Observador de Montevideo de la fecha, se desternilla de risa por las ridiculeces arquitec-tónicas producidas en el proceso, aún inacabado, de la construcción de una semipeatonal en el corazón cívico de Mercedes, ya pomposamente inaugurada pero inconclusa, que a mi me trae a colación dos dichos: Más vale caer en gracia que ser gracioso...pues no le veo el chiste ante el constatado despilfarro de dineros públicos por groseros defectos en la manipulación de los materiales, que hubo que reponer y repavimentar, y en el intento justificativo, extemporáneo, de cargarle la culpa a la producción nacional de cemento ANCAP por los funcionarios municipales, muy “nacionalistas" ellos que usaron baldosas cordobesas, como que no existieran las uruguayas. Tal vez sea humorístico ver un “geyser” o manantial en pleno centro mientras media ciudad con 40ª centígrados a la sombra no tenía el líquido elemento en ciertos y muchos barrios por el reciente tsunami calorífico que arrasa la urbe. O calles periféricas, en tanto, las de la ciudad popular, llenas de pozos y de penumbras, mirando con envidia como la otra ciudad, la coqueta y costeña, es y era un carnaval a giorno en las noches. El otro aspecto qué me venía a colación como espléndida y sabia definición de lo que es el humor es el siguiente: ¡“Humor, Ternura del miedo”!.Cuando no queremos expresar una afirmación acusativa sin anestesia por tribulaciones que ese suceso es tal cual, lo suavizamos con la búsqueda de una elusiva sonrisa...En tanto la disposición municipal dice que los autos deben circular a paso de hombre a cinco quilómetros la hora. Nadie anda así porque nadie es quelonio...es que la peatonal sigue siendo igual a la que fue antes desde que la gente sigue utilizando las antiguas sendas y no la calzada para “pasear”. Sólo usa la calzada para cambiar de vereda. Además, un escuadrón de Inspectores municipales juegan a ser “semáforos humanos” intentando ordenar el tránsito...que se ordena sin tutores pagos por aquello de “Laissez faire, laissez passer” que el mundo camina solo. Toda esa muchedumbre de “encorreados” con cintas fosforescentes sobre torso y dorso , deberían estar donde sí hay peligro vial...que todo Mercedes lo sabe y especialmente en cúales horas y días. Sinceramente, amigo Alejandro...por ningún lado veo lo chistoso del asunto. Pero, la risa es libre. Así que ríase nomás!