SUPER MACHOS DE SORIANO...PERO EN RIESGO DE REGRESIÓN MARICA
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El cornúpeta ícono que identifica ahora a Soriano expresa, en su complementación sonora y visual, que es un departamento fértil. Por lo menos no hay dudas del aserto en Apicultura donde nuestro cantón es el mayor productor de miel del país. Ello ,entre factores varios, responde a que tenemos buenos zánganos, es decir, pródigos machos alados que en el vuelo nupcial alcanzan a la reina aviadora para darle el beso heroico aún a costa de la muerte en el intento copulativo, fertilizando así por extensión todo el enjambre del porvenir. Si los “machitos” estuviesen débiles no podrían competir en esfuerzo para alcanzar a la vedette real y hacerla vibrar de pasión, cumplido de la alta potencialidad genética del colmenar desde que ese vuelo de la vida melífera es un proceso de selección de los más aptos y fuertes, si traemos a colación argumentos darvinianos explicativos.La apicultura está viviendo un drama que aún no nos toca aquí. Pero se están muriendo en la región, fronteras internas y externas, cantidad de colmenas sin determinarse todavía cual o cuales son las causas. Que el mal manejo de antibióticos según algunos expertos... o de enfermedades como la varroa, el loque americano... la debilidad de los zánganos... la sobreexplotación por extracciones abusivas que no racionalizan con cordura el ahorro de alimento hibernal para los insectos.
Para colmo algunos propietarios de campo no permiten colmenas foráneas, o de lo contrario cobran para conceder permisos. La tarea de las abejas es fundamental a la polinización que genera vida vegetal en gramíneas y, de tal manera, alimento para los animales. De esa forma la abeja no sólo produce miel, sino carne, lana y leche, según lo repite el Presidente de los Asociación de Apicultores del Uruguay. La pregunta viene entonces por añadidura: ¿Quién debe pagar a quién? ¿O nadie a nadie por ser un asunto de reciprocidades a pactar? Si, a pactar, ya que a veces los apicultores autorizados son lentos en acatar las sugerencias de cambiar el lugar de sus emplazamientos, dificultando el manejo del campo por el propietario o administrador de la tierra.
Dada la naturaleza procreativa de esta nota, nos preocupa que nuestros zánganos no se debiliten. Que todo el eco sistema de la fortaleza varonil de los himenópteros se acote, y más si sumamos todavía que con la extensión de la hermafrodita soja, transgénica, cuyo polen no sirve para elaborar miel, provoque que nuestros libidinosos machos voladores se transformen en inapetentes mariquitas. ¡Y adiós a las dulzuras de los soles y lunas de miel, rota la meliflua armonía natural!
Se enojó la dama y ganó el varón. Antes del debate televisivo del ballotage francés, los dos competidores, el varón Sarkozy y la mujer Royal, estaban empatados. Post debate, se fugó en las preferencias el político conservador. La dama quedó mirando pa´ la fiambrera. Como conozco poco de política gala, no me interesa en este enfoque si es de derecha y conservador el virtual presidente que sustituirá a Chirac en el Palacio del Eliseo, y que la derrotada provenga del partido Socialista. Sarkozy utilizó con más inteligencia la rivalidad de los sexos e hizo engranar a la dama empleando mejor el seso que la mujer. Más o menos así dijo Mme. Royal en un momento de la pareja disputa televisiva: - “Mi marido odia a los ricos” (Nota de Redacción: Aunque le reque-tesobra dinero y otros etcéteras para llegar a fin de mes...). - “Entonces se odia a si mismo”, replicó veloz Sarkozy. La francesa perdió los estribos montando en cólera, le habían atacado a “mon amour”. El contrincante, ni lerdo ni perezoso, fue contundente: - “Una señora que así se altera no puede ser Presidenta de la República”, recalcó. Allí se acabó todo. No hubiese sido necesario ir a las urnas, auque éstas confirmaron luego que los franceses no son bobos en sus intuiciones. Para colmo el nuevo Presidente les dijo que volverán a la “Grandeur” y al “Honeur” dentro de una política conservadora. Ahhh! festejen con champagne de Borgoña; ellas con un tailleur Chanel y ellos con un Christian Dior.
Hombre de piedra, ¿es o no? Muy buena la gestión de la Comisión de Cultura de la Junta Departamental de Soriano con el apoyo de la IMS , del Centro Histórico y Geográfico de Soriano y del Dip. Arregui, venciendo la tozudez montevideana contra la que se estrellaron las intenciones de la anterior administración, pese a que el Ministerio entonces de Educación y Cultura era del mismo pelo y no distinto como lo es ahora. Lo que sí no está claro es si el inhumado en Bizcocho y exhumado luego por los Losada, es “él” o es “ella”. Como es un cara de piedra no se puede determinar. Además su evolución no llegó a las extremidades superiores ni menos a las inferiores que interesarían al efecto de saber si es XX o XY. Quedamos sin saberlo y se abre un campo curioso a la especulación pues por ahora no existe el ADN pedestre que daría posibilidades de acercamiento a la verdad.
Para mí es “ella”: Una “antropolita” y no un “antropolito”, sin meternos mucho con las concordancias de género en Idioma Español. Fundamento mi hipótesis: Junto a la tan moderna y bella síntesis estilística para resolver los rasgos fisonómicos, resalta la oquedad del vientre. Y el vientre es simbología femenina. La Diosa Madre. Como en las Evas europeas de la prehistoria, los artistas de la piedra exageraban glúteos y mamas, no por inhábiles, sino por mensajeros del principio femenino.
Claro que alguien me podrá decir y yo deberé titubear: Es "él", un narcotraficante pretérito que en ese vientre preparaba y maceraba marihuana o coca para que los muchachitos y muchachitas que lo acompañaban por Bizcocho se dieran la biaba lanzados al vuelo feliz... y no al nupcial de los zánganos del enjambre abejero.
Otra vez el nomenclator. Escuché en audición deportiva de CX121 la necesidad de reactualización del nomenclator de Mercedes, viejo tema en general lerdo a un aggiornamiento. La ciudad lleva el nombre de una mujer, Nuestra Señora de Cataluña. Pero no hay una sola calle con nombre de mujer pues los políticos humeños en esa materia son homófobos. Muy distintos de los doloreños, notoriamente feministas con un gusto especial por las Elena. ¿Quién da nombres? Empiezo yo, burro adelante: “Quitanderas” por las mujeres que acompañaban a los criollos en la Revolución. O Isabel Sánchez, Trinidad Guevara, Herminia Viotti, Elisa Menéndez, Martha Casse. ¡Siga Ud.!
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