La Culpa No es de la Democracia, Sino de Quienes le Rascan el Lomo.
El presidente José Mujica parece ser el líder visible de una exageración en el concepto de la democracia directa -aunque con tumores desde que nace enferma al no tener efectos obligatorios las eventuales expresiones de voluntades y deseos- ya que lanzó a la opinión públca la virtualdad de convocar "Plebiscitos Consultivos" para dilucidar tema asaz espinosas en su complejidad social.
A mi me preocupa. Porque frente a tantos juicios, pongamos, por malas praxis en los actos médicos que se producen en el país, un día se le pueda antojar a alguien, individuo o corporativo, bregar por determinada técnica en el uso del bisturí del quirófano en los Hospitales de Cirugía. Sé de abrir un bagre amarillo.Quizás un pollito para llevarlo a las brasas de madera negra y seca...pero ya de cortar los tejidos de un tipo y rumbo el tajo hacia el apéndice ¡Ni loco opino! Tampoco sobre la currícula de los niveles macro, meso y micro de una eventual reforma educativa.Ni de las variables sobre el Sistema Tributario.
EL EDITORIAL DE HOY, FRAGMENTADO, DESDE "EL PAIS" DE MONTEVIDEO QUE SE COMPARTE EN SU MENSAJE ESENCIAL
-"Gobernar significa tomar decisiones y la lógica de tomar decisiones es que ellas determinarán que algunos van a ser beneficiados y otros perjudicados. Lamentablemente no se puede conformar a todos, porque en una sociedad, en un país, hay intereses contrapuestos de grupos, organizaciones, de personas y hasta de valores. Lo que un Presidente no puede hacer es pasarle el fardo a otro para que tome decisiones en su lugar, no puede decidir ser indeciso, no puede rehusar el compromiso que significa gobernar el país y para el cual fue elegido. Porque si no le gusta hacerlo, está traicionando el mandato que se le dio.
Esa peregrina idea que ha irrumpido con fuerza impulsada por el Presidente Mujica de los plebiscitos consultivos antes de resolver en cualquier tema que deje muchos doloridos -sobre todo en su variopinto conglomerado político-, es absurda y lo único que pone de manifiesto es que el Presidente que asumió el 1° de marzo de 2009 no sabe o no quiere gobernar. Mira permanentemente para la tribuna antes de decidir algo, porque su perfil es de congraciarse con ella, no molestarla. Nadie puede dudar de la gran popularidad de Mujica, de sus dotes de comunicador, de su carisma. Pero eso no lo convierte en buen Presidente. Un Presidente debe ser una persona que está convencida de lo que debe hacer y lo hace (o por lo menos, lo intenta), que no tiene miedo al abucheo de la Colombes o de la Amsterdam a la hora de actuar, que está dispuesto a jugar su prestigio por lo que, a su leal entender, es bueno para el país y sus ciudadanos. Es un hombre de convicciones y acción.
Nada de eso muestra Mujica. Se lo ve con más dudas que Hamlet y con temor a asumir responsabilidades y, entonces, inventa el mecanismo de los plebiscitos consultivos para huir de la toma de decisiones. Que sea otro el que cargue con los costos del error. Eso puede ser muy humano, pero no es propio de un Presidente".
******
Se parte de un error de fondo y esencial en el tema consultivo como soporte para orientar hechos y decisiones gubernamentales:No todos somos iguales.Unos mujeres, otros varones. Unos altos,otros bajos. Otros con más saberes que ignorancias.Otros más ignorantes que sabios.Frente a las desigualdades, surgen ciertas politicas totales y abarcativas de equidad.
Pero el tema del plebiscito consultivo no puede introducir riesosamente en la presencia rifirrafe de opinantes variopintos por quienes saben algo y por quienes absolutamente nada saben sobre temas complejos.Si la cordura, pongamos, pasa por los sabios, pero las mayorias cuantitativas son las de los ignorantes, tan permeables desde lo que les dicen lo asumen en réplicas eslogánicas que arraigan en sus depoblados cerebros, tal el mío en minería, en medicina, en física nuclear,etc.,etc, ya se sabe cuál será la dimensión de la "victoria" popular sobre una postura razonable y justa.¡Qué lo tiró! con razón el ex Presidente T.Vázquez alertaba que a veces las mayorías se equivocan...
A mi me preocupa. Porque frente a tantos juicios, pongamos, por malas praxis en los actos médicos que se producen en el país, un día se le pueda antojar a alguien, individuo o corporativo, bregar por determinada técnica en el uso del bisturí del quirófano en los Hospitales de Cirugía. Sé de abrir un bagre amarillo.Quizás un pollito para llevarlo a las brasas de madera negra y seca...pero ya de cortar los tejidos de un tipo y rumbo el tajo hacia el apéndice ¡Ni loco opino! Tampoco sobre la currícula de los niveles macro, meso y micro de una eventual reforma educativa.Ni de las variables sobre el Sistema Tributario.
EL EDITORIAL DE HOY, FRAGMENTADO, DESDE "EL PAIS" DE MONTEVIDEO QUE SE COMPARTE EN SU MENSAJE ESENCIAL
-"Gobernar significa tomar decisiones y la lógica de tomar decisiones es que ellas determinarán que algunos van a ser beneficiados y otros perjudicados. Lamentablemente no se puede conformar a todos, porque en una sociedad, en un país, hay intereses contrapuestos de grupos, organizaciones, de personas y hasta de valores. Lo que un Presidente no puede hacer es pasarle el fardo a otro para que tome decisiones en su lugar, no puede decidir ser indeciso, no puede rehusar el compromiso que significa gobernar el país y para el cual fue elegido. Porque si no le gusta hacerlo, está traicionando el mandato que se le dio.
Esa peregrina idea que ha irrumpido con fuerza impulsada por el Presidente Mujica de los plebiscitos consultivos antes de resolver en cualquier tema que deje muchos doloridos -sobre todo en su variopinto conglomerado político-, es absurda y lo único que pone de manifiesto es que el Presidente que asumió el 1° de marzo de 2009 no sabe o no quiere gobernar. Mira permanentemente para la tribuna antes de decidir algo, porque su perfil es de congraciarse con ella, no molestarla. Nadie puede dudar de la gran popularidad de Mujica, de sus dotes de comunicador, de su carisma. Pero eso no lo convierte en buen Presidente. Un Presidente debe ser una persona que está convencida de lo que debe hacer y lo hace (o por lo menos, lo intenta), que no tiene miedo al abucheo de la Colombes o de la Amsterdam a la hora de actuar, que está dispuesto a jugar su prestigio por lo que, a su leal entender, es bueno para el país y sus ciudadanos. Es un hombre de convicciones y acción.
Nada de eso muestra Mujica. Se lo ve con más dudas que Hamlet y con temor a asumir responsabilidades y, entonces, inventa el mecanismo de los plebiscitos consultivos para huir de la toma de decisiones. Que sea otro el que cargue con los costos del error. Eso puede ser muy humano, pero no es propio de un Presidente".
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Se parte de un error de fondo y esencial en el tema consultivo como soporte para orientar hechos y decisiones gubernamentales:No todos somos iguales.Unos mujeres, otros varones. Unos altos,otros bajos. Otros con más saberes que ignorancias.Otros más ignorantes que sabios.Frente a las desigualdades, surgen ciertas politicas totales y abarcativas de equidad.
Pero el tema del plebiscito consultivo no puede introducir riesosamente en la presencia rifirrafe de opinantes variopintos por quienes saben algo y por quienes absolutamente nada saben sobre temas complejos.Si la cordura, pongamos, pasa por los sabios, pero las mayorias cuantitativas son las de los ignorantes, tan permeables desde lo que les dicen lo asumen en réplicas eslogánicas que arraigan en sus depoblados cerebros, tal el mío en minería, en medicina, en física nuclear,etc.,etc, ya se sabe cuál será la dimensión de la "victoria" popular sobre una postura razonable y justa.¡Qué lo tiró! con razón el ex Presidente T.Vázquez alertaba que a veces las mayorías se equivocan...
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