miércoles, 15 de diciembre de 2010

Las Cosas Están Claras en el Uruguay: ¿Por qué las oscurecen?


El Uruguay optó desde la gran mayoría de su población por una “patria socialista”.
En el Socialismo tiene precedencia lo estatal sobre lo individual.
El Estado es el elemento regulador de la vida comunitaria, sobre todo económica, y  agente Planificador para evitar las crisis, fenómenos en que coliden los bienes tangibles e intangibles de los consumidores con las primarias   necesidades de los aborígenes. 
Existe una Crisis general y Crisis testimoniales que ponen en jaque al Sistema
Uruguay.
Entre estas, la de la Mugre pestilente comunal, acumulada por toneladas en la capital del país; la de los Bancarios; la de los servicios médicos anestesistas con cutro mil ciudadasnos abandondos en sus derechos a la salud,etc.
Al parecer no se les da " a todos de acuerdo a sus capacidades y a sus necesidades”, emblema de la victoria folletinera del socialismo.
Es la hora del Estado. Empleando su Poder etático que, vía Gobierno, está en condiciones de ejercerlo según la civilización política.
Le dará la forma que quiera para lograr el procedimiento planificador que restaure el “socialismo” filosófico y REAL que la gente quiso de forma tal que el orden social impere en el contrato comunitario de los habitantes.
Es muy fácil: están los votos para “esencialidades”, “emergencias sanitarias” y “medidas prontas de seguridad” y un ejército, marina , aviación y policías leales a su compromiso militar de respaldo frente a insurgencias de potenciales desobedientes.
Se necesita operar urgente en quirófanos, cajeros automáticos y en calles limpias. Pues bien ¡opérese!
Si hay desacatos,se ingresa en el orden penal por los promitentes delincuentes.
 Y está para ello el Poder Judicial con su aparato disciplinar del derecho positivo uruguayo...
Todo fácil.
¿Para qué tantos revuelos? Los uruguayos votaron así.
Aplíquese la voluntad soberana, tan expresa en noviembre del año pasado y asumida gubernamentalmente en febrero/ marzo de este año.
No jodan más...
Si no gusta “el mundo tal cual es”, pues bien, hagan caer los Ministros, el Presidente disuelva las Cámaras y llama a elecciones de legisladores, aunque él siga en el cargo donde cada vez se le torna más difícil timonearlo .
Ya no repite más lo que te decía con risueña y sublime sabiduría callejera de, a la vez, pontificar tanto sobre las alternativas duplex de usar opcionalmente “la una como  la otra”...a gusto de lo aleatorio y contingente.
De a poco el  hombre se da cuenta que un aparato estatal no es cosa de nabos, y comienza a acordarse de Cnel.Lorenzo Latorre...que hubo de tomárselas antes de su tiempo gubernamental, y eso que contaba  la ayuda de José  Pedro Varela .
 Don Lorenzo  que hizo muchas cosas, entre otras, muy buenas e imprescindiblemente  necesarias para modenizar  un país feudal.
Y los intelectuales, en tranquiliad perezosa y oportuna, escondidtos escribiendo sólo poesías bonitas, no jugando a ser la posterior protestona, elucubrante Generación del 45.

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