Hoy y Ayer en la Farándula de las Metrópolis Platenses y la quietud contrastante de la aldea Nuestra Señora de las Mercedes.

El Carnaval de Mercedes, lidia de gallos

Dibujo de Luis "Pori" Ferrer.

• Luis “Pori” Ferrer por Facebook me requirió sobre un mítico personaje conocido por  el mote popular de "Zenona". Era de  Mercedes, Soriano, allá por  la segunda mitad del siglo pasado, por el 50, año del glorioso Maracaná, ahora rescatado con la nueva hazaña del futbol oriental, Campeón de América,y ¡en Buenos Aires 2001! como para molesar a los porteños que habían preparado el catering...y nuevamente los muy mal educados uruguayos , por acostumbramiento, se llevaron a la novia para Montevideo, vestidita  de Copa y sin casar...

• Obvio el prólogo explicativo pues, en el desarrollo del diálogo, creo, surge el motivo de la duda de Ferrer.

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Luis Ferrer

.=Ahora que un travesti en la Argentina dice que vá a ser mamá de mellizos, me surgió la inquietud de saber si Zenona ¿no habrá tenido hijos en Mercedes ? ¿Sabes algo Charo ?

La televisión porteña me ha cambiado tanto los parámetros sexuales que voy al baño y me reviso, no sea que medio dormido...

Alfredo Saez ‎

="Zenona" era el personaje en el disfraz del carnaval dionisíaco....que apenas duraba una quincena, intensa, bulliciosa, festiva, pues había que gastarla en plenitud popular porque verdaderamente el resto de todo el año ¡ ya no era más Carnaval, como hoy sí!

En los diferentes meses  don Isidoro Cano recuperaba su rango civil de capataz de cuadrillas fuertes en las décadas del 40 o el 50 en el municipio de Soriano.Ni al duro Intendente Chelle se le callaba don Isidoro.
Cuando los febreros de murgas y mascaradas, Zenona tenía además de tandem de saludables gracias cómicas a su alter ego y sosías espiritual, "Medio Litro" (Pujolar). Frente a cualquier contingencia, espalda contra espalda, y ellos dos, solos, igual paraban a todo un escuadrón.

Mientras tanto, las burlas fuertes y burdas eran para " Peluzón", payaso desgraciado , a veces Marqués de las Cabriolas, trepado, monárquico, sobre un carro insignia ornamentado desde la loca farándula pintarrajeada, recitando sus versos de una Poesía tan pura, auténtica y lastimera.
La gente, al ver al pobre infeliz cotidiano de aquellos días extra reinado de Momo, victima anual de sadismos  no afines a  la semana especial,y  de chanzas y agresiones, no escuchaba con atención sus inventivas rimadas en filosófico y profundo tenor. Ese sí que era un caso de increíble travestismo intelectual en la belleza de sus versos catársicos, propios de un alma noble, naif, enredada en los vericuetos de su cerebro psiquiátrico . Sin embargo cuan  enriquecido estaba de lirismos incomprendidos por la turba, la masa, siempre imbécil en sus carcajadas estúpidas y sosas.

No sé, Luis, si acaso respondo a tu requerimiento.