-Cuando el uno que ya no está le pide al otro que ahora está, una bondadosa dádiva que no la consideró en su momento de gloria-.

Se conversa entre políticos para que la merma circunstancial de sus salarios y sinecuras , por ahora no definitivas, adquiera de futuro forma permanente. ¡Alerta!...que las aguas comienzan a calmarse entre navegantes rivales ó a volverse más procelosas.

-Un asunto duplex pero unido en este Tema que responde, en mi interpretación, a dos motivaciones que chocan, que colisionan, que son contradictorias, que estimulan naúseas. Y digo DOS: 1) Por una lado es una propuesta de recibo -náuseas incluidas- pues en casos son escandalosas las diferencias de retribuciones y recompensas sociales que reciben ciertos estamentos políticos y afines de la sociedad con respecto a esa otra minoridad marginada desde lo que llega a la mesa de tanta gente menoscabada. 2.) Quienes proponen, no lo hicieron en su momento y contribuyeron muy decisivamente desde las mayorías absolutas que manejaron y ostentaron ( no digo "detentaron" pues los respaldaba el "voto popular"), a crear los desfasajes dinerarios entre lo mucho para ellos y lo poco que alcanzó a tantos.
Si la Moral gobernara, no admitiría jamás la decisión salvo que conllevara un principio de Justicia extrema en la asignación de los nuevos números filantrópicos..Pero como la Moral Política es hemipléjica, vaya a saber qué pasa- o qué no pasa- si se carga de "politización" turbia ...si se carga, lo cual es muy viable.