Tranquilos...¡JUan Pueblo Paga!...pero ya se advierte que la inocencia frente al fraude no paga....

.Yo he seguido con cierto interés de media altura- ni al ras pero tampoco de centro al área- el escandaloso asunto de la ex Pluna, fenecida línea de aviación de la República Oriental del Uruguay, mi país. Me ha quedado un juicio personal de gran des-prolijidad en la operativa del suceso y ciertas indignidades de notoria irracionalidad financiera a partir de la época del administrador argentino Campiani. Degenerado el volátil y tempestuoso contencioso, he aquí lo que aún no veo claro en el marco exploratorio de un auto interrogatorio:

a) ¿Hubo una erosión en los dineros públicos que, por no manejarlos el hombre común como "ordenador del gasto", devenido apenas en ciudadano callejero -ajenizado de gabinetes y oficinas- no ve ni monitorea tales recursos monetarios, entes intangibles , más allá de que con ellos se pueden hacer casas y hospitales, escuelas y carreteras públicos ....obras ahora esfumadas que deberán seguir esperando, pero SIN que se produzcan virulentas alergias depositadas en el bolsillo del pantalón que se usa personalmente, día a día, por quienes quedan bajo abstractas sospechas por ser los actores directos de primeros planos decisorios?

b) ¿O acaso las cifras millonarias que andan en juego ES dinero constante y sonante que aterriza en el pantalón del político u empresario fulano de tal, ese mismo que calza y viste, investido de una legitimidad que se le concedió en términos de representación gubernamental por la soberanía digitada y administrada mediante partidos políticos....y otros agentes de presión como son los laborales corporativos?

* Yo que sé....no me solivianta tanto el ardor de la primera posibilidad, aunque se me acuse de insensibilidad patriótica colectivista ante esta modorra frívola frente al innoble transfuguismo de recursos necesarios e imprescindibles al bien común.

* Pero me altera mucho, muchísimo, que se lo hayan pelau para sí alguno de los personajes que han aparecido últimamente en ardientes crónicas.

* Y me está ocurriendo un fenómeno de psicología profunda e individual que en verdad nunca lo había experimentado antes.Tengo amigos que no son de mi misma convicción política, pero a los que estimo y quiero.Y sobre todo, respeto pues considero el valor amistad superior a otros, quizás subsidiarios.
Sin embargo he notado una manchita en mi hipotálomo.

 Se va debilitando esa empatía hacia ellos -no sé aún en qué grado-, pues empiezo a verlos como cómplices de este mórbido rifirrafe pues alentaron en complicidad de segundo grado el saqueo desde su decisión urnaria de noviembre del 2009.

Me apena lo que me pasa.