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Se sabía de la inminencia del suceso pero , no por previsto, el fallecimiento de
Cacho Navarro Cordero está impactando profundamente en el sentir de mucha gente de Mercedes y de Soriano.
Fue un luchador extremo ,con la aúrea medianía de los grandes. Cuando comenzó a incursionar en la radiotelecomunicación , definió una personalidad atrayente que cautivó a muchos. Como es natural, desde el sello de la diversidad humana, comparto que no haya concitado su verbo unanimidades. Cuestión, por otra parte, imposible.
Fue comerciante, deportista, promotor de espectáculos masivos, filántropo con fino sentido humanístico hacia los necesitados y sus emergencias casuísticas, político líder de grupos en torno, siempre, a la bandera del Partido Nacional.
¿ Algo mas? Sí.
Del galante ejército de Cupido, certero ballestero.
Es difícil ser pretendidamente abarcativo en la definición de un obituario sobre la figura de Cacho sin menoscabar u omitir un items, un rango, un asunto en el que no haya tenido su color propio y personalísimo en aguerrida e intensa participación activa, a través del análisis, la caracterización y las propuestas de fenómenos públicos sobre nuestras realidades citadinas.
Quienes hoy se manifiesten públicamente en resaltar la existencia terrenal del fallecido ,compondrán al final de las fúnebres evocaciones una sumatoria de mil facetas. Es que fue, sin dudas, un polifacetario.
Siempre mostré mi asombro por el desarrollo cognitivo y afectivo que tuvo estandarte en su inteligencia oratoriana y en los rasgos del comportamiento social que esa misma capacidad intelectual le subsidió.
Desde aquel lejano comienzo en lo que parecía ser conducta natural a un muchacho de pueblo, de barrio, sin coberturas de cátedras ilustres que solventaran la ducha formación libresca o la influencia de doctos, de a poco y a partir del diálogo que mantuvo en amigable maridaje con un micrófono, estallaron con potencialidad gradual y creciente sus neuronas. Se transformó así en una poderosa voz de captación , influencer no ya no para muchos, sino para muchísimos mercedarios y sorianenses.
Sobre todo en Mercedes podemos -sin ninguna aprensión- afirmar que hay un
"navarrismo" que aprecia las virtudes que expuso
Cacho, conseguidas por si, sin los andamios artificiales de ningún padrinazgo ni clase social nutricia.
Deja un lugar muy arduo de poder re-ocuparlo.
En lo personal, siento enorme pena por su ida. Extiendo un sincero abrazo a sus familiares , amigos, correligionarios y a sus fidelísimos radio escuchas que se han quedado sin su audífono espiritual mayor.
Que en paz descanse el gran guerrero de tantas batallas de nuestra organización cívica, respetado por la enorme mayoría, cultor de "
micrófonos abiertos" por su virtuosa esencia de ser un republicano paradigma. Conste.
