-DE UN PROLOGO A UN EPILOGO-

*ME ACUERDO QUE…

*ME OLVIDE QUE…

* SÉ QUE…

*LAMENTO QUE

* ME PREGUNTO SI…


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• ME ACUERDO QUE A VECES… no me acuerdo pues adviene a mi el misticismo de San Juan de la Cruz : -“Me muero porque no muero”….y termino agregando compungido que ¡Oh! Me olvidé de vivir.


• ME OLVIDÉ QUE… la condición de una buena memoria es saber olvidar y por eso os digo contundente: _ (Oh! Me olvidé, disculpen!)


• SË QUE nada sé y eso ya es razón suficiente .¿Verdad, Sócrates? Tiempos los nuestros que atormentan y perturban las faks news, malditos aforismos de mentiras sacralizadas que dan Poder infame a los miserables en sustentos depredadores de comunidades sanas o ingenuas.


• LAMENTO QUE… te hayas ido… si ya estaba pronto para perdonarte tras aquella confesión sin párroco.


• ME PREGUNTO si no llegó el momento de volver al viejo Jean Jacques Rousseau que ambicionaba para su Emilio niño, no una clase junto a condiscípulos, sino un ayo exclusivo para la “educación negativa”.¡Nada de conocimientos! Solo el desarrollo de capacidades y experiencias , potencial nutriente de adquisiciones cognitivas, previo a los contenidos de la malla curricular. Nada de clases compartidas junto a niños microbios que infectan con sus bullings mórbidos y que el sistema corporativo escolar alimenta y degenera. Solo Emilio y su ayo! Puro y bueno!invulnerable a maldades consentidas. Ya le alcanzará a Emilio -muy después- el tiempo de las socializaciones y la “Educación positiva”, plena de fórmulas y teoremas engorroso. Estará más maduro para formar familia y ser feliz.