Luis "Pori" Ferrer , la Historieta como Didáctica hacia la Historia y sus Lagunas.

Luis "Pori" Ferrer Labriola

Luis "Pori" Ferrer es un artista plástico nacido en Mercedes, ahora radicado en Paysandú, pero amante de las soledades reflexivas de Valizas en el Lejano Este nacional.
Cree  Pori que no se concibe el arte sin mensaje y que cada obra es un producto inacabado que hay que remodelar .Por eso invita , con lapices y carbonillas en mano, a los espectadores de sus creaciones "inconclusas" a integrarse en reelaboración espontánea a tiempo real de forma tal que lo que engendró a primera esperma será luego una genética colectiva.
Cautivado por los "comics", o por la produccion de tantos magnos creativos al estilo de Julio "Peloduro" Suárez,  el rosarino de Santa Fe Fontanarrosa ,  el supremo Quino de la  reina Mafalda, o en el yanqui Andy Wahol,vio en el estilo una cautivante forma de encontrar los agujeros negros de la Historia del Uruguay. Es que muy  poco -y siempre insuficiente-  sus historiadores no  han podido  incursionar a plenitud mínima en la vida infantil y juvenil de José Artigas, el gran icono de la construcción simbólica del país de los orientales , ahora trocados en "uruguayos"  desde la  ciencia nominológica,  quizás no muy confiable . Aunque sí,   por lo menos, funcional....
La Historia  celeste como relato  anda entre leyendas negras y rosas desde 1828 cuando la Banda Oriental fue  segregada políticamente  de su vientre original platense en lo que Guillermo Vázquez Franco en recomendable libro recién editado llamó "Traición a la Patria". Fue la derrota de Artigas tras la guerra civil  entre los cívicos portuarios de Montevideo atados a las conveniencias anglosajonas  y el alma campestre del hinterland acriollado.Tal derrota no obstó  a que como el Cid Campeador  aun muerto  se lo subió a la silla del noble Babieca para combatir en choque final a los sarracenos así su imagen espantaría por cristiandad a los islámicos. El Hombre de las Instrucciones del XIII fue el  sublimado imago campeón  que alumbró la unidad nacional.  Lo exige, claro, cualquier Mito ordenador de simbologías patrióticas  que se precien... tras la consumación de la secesión provincial, la que llega taciturna y confusa  hasta nuestros días.
La Historiografía ( estudios históricos testimoniales imprenteros o con bytes) se arma en su epidermis con las metodologías del academicismo que ubican inducciones y deducciones a partir de los documentos.Si no los hay, no hay Clío. Pero los documentos  pueden ser interpretados  y vale mucho la ideología  del locuaz intérprete con sus pragmatismos apriorísticos. Por eso hay que tomar precauciones con los afanes regeneradores de las "historias recientes" y sus versatilidades zigzagueantes.
¿Qué ocurre, en tanto, cuando los documentos no existen o han misteriosamente desparecido? Seguramente que hay que ir a sucedáneos de menor prestigio.¿Podrán ser la tradiciones orales? O acaso  en un sincretismo de mil fuentes ¿ la imaginación del ocasional proponente con  nuevas o resurgidas aguas benditas de frescos hontanares?
A Luis Ferrer Labriola le esta seduciendo esta última  fórmula.
Sus historietas sobre los años perdidos de Artigas me  atraen en lo personal .Motivan posturas  hacia revisionismos. Los alientan cuando nuestras emergencias -las del país actual y  contemporáneo- empiezan a cuestionar  el visible desflecamiento de broncíneos testamentos ilustres, puestos en duda. Cada vez se pronuncia más la distancia entre la mitología azulada de patricios primates, pedagógicos e históricos , sus enseñanzas, y el producto,  el que  ya no alimenta afanes ni fervores de verosimilitudes: sea la diferencia crucial entre el  indefinido saber que debe  saberse y el que meramente se recita en rutinarias fiestas escolares.
He aquí un mostrador de,  otra vez, una Nueva Historia....(o Historieta, si mejor os place) en los "comics" de Luis "Pori" Ferrer Labriola: