viernes, 31 de diciembre de 2021

-El Año Nuevo de 2022-

Sentí que me dijeron

“se es Optimista

por convicción

y Pesimista

por razón”.

Para salvar la colisión,

dudas e incertidumbres,

venga un oxímoron,

auto confeso Escepticismo

de mi corazón.


Se va el viejo Año

febril viene el recambio

con virtual desengaño:

Cepas virósicas juegan

al intercambio.


No deben de preocuparnos

en el conteo de los años

los horóscopos del calendario

que solo bien los dispone

cosmética la Astronomía.

Magos y zahoríes

danzantes se divierten

y no tildan ni las íes

sea el si o por el ¡sí!

Nos faltan filósofos en más,

que se murió el gran Bauman,

no tantos míticos chamanes

se hacen los osos

reptando como caimanes.


Los griegos y sus eras

arrancaban en la primera Olimpiada,

los cristianos en la primicial Navidad,

judíos por el Rosh Hasbaná

aniversario de Adán y Eva,

muslims en la Hégira hacia Medina

y los cavernarios padres prehistóricos

desde impactos solares y calóricos

sobre el pétreo dolmen Stonehelge.

Retoque hubo

del Papa Gregorio…

hasta que el “Cambio Climático”

ya nos prepara novicias calendas.

¡Penurias nos traerán...

hasta el Apocalipsis Now!


No obstante confiamos

en la era del Nuevo Sol

anunciatura de Inti y Pachamama

¡ con reformulación sanadora !


***


Vivimos a este tiempo real del hoy presencial, el pasaje pontificio de un Año a otro. ¿Cómo será?. No hay profecías que el futuro no las admite. El pasado ya fue y da pocas pisVtas. Nos queda vivir nuestro presente....pero igual nos abrimos a intentos futuristas sobre las bases fundacionales y proyectivas de lo ya vivido.

No hay comentarios: